sábado, 21 de marzo de 2009

maraDIOS

Dicen que en un partido de los Cebollitas de Argentinos Juniors, cuando ya iban ganando 8 a 0, Diego Maradona, que por entonces andaba por los 11 años, empezó a patear por arriba del travesaño cada vez que quedaba en posición de gol. Tiró por lo menos media docena de veces a las nubes. Cuando le preguntaron qué había pasado, explicó con candidez: “Como el partido ya estaba terminado y me aburría, le apuntaba a un nido de hornero del árbol, ese que está atrás del arco”.